De puro romántica nomás, y porque la mística que lo acompaña lo acredita, siempre he considerado que el vino es la muerte y resurección de la uva. Que su vuelta a la vida sólo puede manifestarse en un vino. Pero en la era de la diversidad han hecho trizas mi afirmación: la uva también se convierte en cerveza. O más o menos.
La cervecería Andes, que es mendocina, pero pertenece al grupo dueño de la cervecería Quilmes, hace tiempo que viene coqueteando con el tema de las uvas y el vino. Quiere terminar con la grieta del vino y la cerveza. Y, para ello, muestra lo bien que pueden llevarse ambos en distintos momentos. Por ejemplo, con esta nueva cerveza de la línea Andes Origen que incorporó uva criolla.
Así nació una edición limitada de Andes Origen Criolla, estilo wine beer. ¿Y a quién llamaron para elaborar esta cerveza “de uva”? Al reconocido enólogo Alejandro Vigil.
Se trata de una edición especial “para darse el gustito”, dice el comunicado. A mí me parece que es más para probar “a ver qué onda”. Es decir, a ver qué dice el consumidor y según lo que suceda vemos cómo seguimos.
Mientras tanto se cuenta que la cerveza siguió los pasos tradicionales de su elaboración aunque fusiona el mosto de las maltas tostadas con el mosto de la uva criolla, sobre la que Vigil aportó su conocimiento.
“La uva Criolla es una cepa con mucha historia, que en los últimos años volvió a ganar valor gracias al trabajo de muchos viticultores y enólogos. Poder incorporarla a una cerveza fue un desafío muy interesante que encaramos junto a Andes Origen. También es una gran alegría poder acercar, de una manera diferente, las propiedades de esta uva a más consumidores”, comentó Alejandro Vigil.
Es que la muchachada de Andes Origen no llamó a cualquiera para este proyecto. Este enólogo, conocido por sus grandes vinos El Enemigo, también produce en Mendoza la cerveza Chachingo, en honor a la localidad en donde se encuentra emplazada su bodega, en el departamento de Maipú. A ello se suma la cervecería Chachingo Craft Beer en una de las avenidas más lindas de la ciudad de Mendoza.
¿Cómo es esta cerveza de maltas y uvas? De color tinto-cobrizo, amargor bajo y sabor elegante con notas de caramelo y tostado, aunque con un dejo ácido y astringente. La espuma es de cuerpo medio pero persistente y puede acompañar comidas de sabores intensos.
Esta descripción se parece demasiado a la del vino. A veces pienso que la gente de la cerveza es tan inteligente que se van a apoderar de su discurso también.
Más allá de mis opiniones en escrito es una apuesta a otro producto, distinto. Quien la pruebe dará su veredicto. Y según cuántos sean esta edición limitada tal vez se convierta en edición de masas o, simplemente, en el recuerdo de un intento.
